domingo, 28 de septiembre de 2008

¿Dónde estamos y para dónde vamos?

Nosotros nos preguntamos a diario cuando observamos con gran inquietud el entorno en el cual nos desenvolvemos y en el mundo en donde vivimos dónde estamos y para donde vamos? Son tantos los conflictos que aparentemente no tienen solución, el hambre y la miseria, el derramamiento de sangre innecesariamente, los corruptos, las desigualdades, la destrucción ecológica, las ambiciones sin frenos que produce tristeza. ¿Qué podemos esperar del futuro? Solamente con el conocimiento del ayer y las realidades de este presente podemos visualizar el mañana… deprimente. Nuestra generación y los valores y que hemos aprendido no han sido muy fuertes. Nuestra única esperanza es cambiar y desaprender lo que se nos ha enseñado, revalorizando nuestras metas e ideas. Lo más difícil para nosotros es ver que nuestros compañeros y amigos no comparten esta visión catastrófica, creen que todo es color de rosa y que su celular, mp4 y el estar de moda es todo lo que se necesita. Tienen una noción de un futuro de alta tecnología donde nada les faltará para su bienestar personal. Están equivocados y no los saben o no lo quieren ver. Pocos somos los jóvenes que sabemos que las cosas no andan tan bien y que la alta tecnología puede ser un contaminante más para destruir nuestras vidas en un futuro no muy lejano. Existe una carencia de jóvenes que estén conscientes de los peligros inminentes que enfrentamos. No ven que la raza humana va por el mal camino. Quizás, desapareciendo del planeta o el planeta quedando inhospedable para cualquier ser viviente. Estamos muy conscientes de los innecesarios y sangrientos conflictos entre las naciones y los gobiernos, y de la valoración del dinero más que de la supervivencia y el desarrollo saludable de la humanidad. Como jóvenes estudiantes de bachillerato, lo único que podemos hacer es difundir nuestras ideas con puño y letra, platicando con nuestros compañeros y amigos. Simplemente, debemos cambiar nuestro enfoque, nuestra forma de vida abusiva, nuestro camino de destrucción por uno de construcción. Motivar el cambio y, sí estamos a tiempo. Así crearemos un futuro donde seamos seres dignos, con paz, igualdad y hermandad. Así gozaremos de un planeta donde el aire sea puro y todos los seres humanos podamos disfrutar de la armonía y coexistencia pacífica. No sabemos “a donde vamos” pero si sabemos que podemos “hacer”.

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